Historia e intenciones del trabajo
Empezamos el trabajo investigación sobre la persona a la cual pertenecía este terreno, desde ahí nació el desafío de transportar la experiencia que nos llegaba de esa persona (hoy fallecida) al espacio: como si este fuera un limbo, como si fuera el paso previo a desfilar hacía…no sabemos hacía donde, solo sabemos que este lugar, a través de sus símbolos, sus esculturas, sus elementos en lugares atípicos, alega a un plano más allá de lo que somos que en su quietud nos interpela.
El nublado fue una decisión de mantener un vilo plano por sobre todas las cosas, como si este fuera un espacio inalterable, que no dejar que la luz fluya directamente sobre los objetos y el espacio, si no que este lugar actúa por sí solo, con sus propias y enigmáticas herramientas.
Las tomas comparten similitudes en casi todas: detrás de un objeto siempre hay una inmensidad verde atrás, encontramos la vida en este asunto. Los objetos se pierden en la lectura de la imagen cuando uno la desarrolla, como si estos fueran un instrumento más en el bosque pero no, el bosque los toma prestados y los ensambla consigo, abriendo preguntas: ¿Cómo llegaron ahí? ¿Cómo los asimiló la naturaleza?
Un fuera de foco desdibuja varias tomas, nos deja primer plano detallado mientras que el fondo se pierde (y viceversa), nos basamos en esto para seguir en sintonía y demostrar que los objetos cumplen una función propia: demostrar que allí hubo vida, que pasó, conectó y se fue.
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